El diputado general ha presidido el acto de primera piedra de la nueva residencia para personas mayores y personas con discapacidad, y centro de día, que contará con 150 plazas públicas
Es el primer centro en Álava que atenderá a personas mayores con perfiles diferentes, incluidas personas con enfermedad mental y discapacidad intelectual que han envejecido y pasan a formar parte del colectivo de personas mayores
Se estima que entrará en funcionamiento en 2023
Vitoria-Gasteiz, 26 de marzo de 2021. El complejo residencial Arabarren ha echado a andar esta mañana con el acto de colocación de la primera piedra en una parcela situada en la zona de Lakua de Vitoria-Gasteiz. El nuevo centro sociosanitario contará con 150 plazas residenciales y de centro de día destinadas a personas mayores y con discapacidad. La totalidad de las plazas serán públicas y concertadas por parte de la Diputación Foral de Álava con la cooperativa de iniciativa social Arabarren, que gestionará el centro. Se estima que la residencia entre en funcionamiento en 2023.
Situada en la calle Blas de Otero, Arabarren atenderá a diferentes perfiles de personas usuarias. La parte residencial para personas mayores tendrá 100 plazas divididas en cuatro módulos de 25 plazas cada uno. En dos de los módulos (cincuenta plazas), se atenderá a personas mayores con deterioro cognitivo, mientras que en los otros dos residirán mayores con enfermedad mental (25) y mayores con discapacidad intelectual (25 plazas).
Asimismo, contará con una residencia para personas con discapacidad física severa, con capacidad para 25 residentes, y se completará con un centro de día para 25 personas mayores.
El 75% de las habitaciones de los módulos destinados a personas mayores de Arabarren serán individuales, al igual que la totalidad de las destinadas a personas con discapacidad física severa. De las 125 plazas residenciales, 101 serán individuales y 12 dobles. Se ubicará en un único edificio con planta baja y dos plantas de altura, con una superficie construida total de más de 7.700 metros cuadrados, y contará con una zona verde. La planta baja estará dividida en espacios diferenciados por cada uno de los tres equipamientos y agrupará además las zonas comunes de todos ellos.
El acto de colocación simbólica de la primera piedra ha estado presidido por el diputado general de Álava, Ramiro González, que ha rendido un homenaje a las personas mayores que han fallecido en las residencias alavesas como consecuencia del coronavirus y ha expresado su agradecimiento al conjunto de residentes, familiares y profesionales del sector sociosanitario “por el ejemplo que han dado en estos meses aciagos”.
Durante su intervención, el diputado general ha destacado que Arabarren es “más que una residencia. Es un proyecto único e innovador en el cuidado a las personas con el objetivo de mejorar su calidad de vida, que ofrecerá una respuesta diversificada a los distintos perfiles de personas mayores, promoverá la investigación, estará preparado para la era poscovid, caracterizado por ser un modelo de colaboración público-social, y gestionado por una cooperativa de iniciativa social”.
“Miramos al futuro de Álava, al reto demográfico que tenemos a la vista. Por eso, este Gobierno Foral está haciendo ya una fuerte apuesta por incrementar la oferta de plazas residenciales” gracias a Arabarren, ha añadido Ramiro González.
En el acto, han intervenido la presidenta de la cooperativa, Amagoia Barandiaran, y el vicepresidente de Mondragon Corporación, Alberto Gorroñogoitia, quien ha señalado que “el sector sociosanitario es donde las señas de identidad de Mondragon, centradas en la persona y su dignidad, cobran mayor sentido, por tratarse de una actividad de personas y para las personas”.
Un centenar de socios y socias trabajadoras
Por su lado, Amagoia Barandiaran ha puesto en valor que se trata de cooperativa que “nace en Álava”, de ahí el nombre de Arabarren. “Somos una cooperativa alavesa para las y los alaveses, y que trabaja para nuestras personas mayores y personas con discapacidad física severa. Como cooperativa de trabajo asociado, nacemos con la vocación de incorporar más de cien personas como socios de trabajo de la propia cooperativa. A partir de ahora este va a ser nuestro mayor reto: presentar nuestro proyecto para ilusionar a personas que quieran acompañarnos en crear la familia Arabarren”.
La cooperativa que pondrá en marcha y gestionará el centro residencial está participada por socios trabajadores, la cooperativa Krean (Mondragon Corporación) que ha diseñado el edificio y se encargará de su construcción, e IMQ Igurco, empresa referente en la gestión de servicios sociosanitarios y que ha aportado su conocimiento en la materia.
También han estado presentes en el acto los máximos responsables de estas entidades: Javier Aguirregabiria (director general de IMQ), Santiago Canales (director general de IMQ Igurco), Jon Berbel (director general de Krean Group), y Asier Etxabe (director de Krean Promotion).
Tras las intervenciones, han sido el diputado general y la presidenta de la cooperativa Arabarren los encargados de introducir varios objetos en la urna conmemorativa del acto de colocación de la primera piedra: los periódicos del día, un plano de la residencia y una mascarilla quirúrgica, símbolo de la actual situación de pandemia de coronavirus.
El diputado general de Álava ha destacado las principales características del complejo residencial:
Modelo inclusivo que ofrece una respuesta individualizada a personas mayores de colectivos diferentes, esto es, con deterioro cognitivo, enfermedad mental, y discapacidad intelectual. En este sentido, se trata del primer centro en Álava que va a permitir atender de forma adecuada a aquellas personas con enfermedad mental y discapacidad intelectual que han envejecido y pasan a formar parte del colectivo de personas mayores.
Promoción de la cultura de la innovación en los cuidados a las personas, con el objetivo de mejorar su calidad de vida, que se materializa en una atención especializada a las personas con demencia en fase avanzada, y donde el modelo de atención del centro esté basado en el respeto al principio de autonomía de las personas.
Fomento de la investigación que se realiza en Álava con empresas tecnológicas y universidades, sobre el modelo de atención y de cuidados, el avance de la fragilidad, discapacidad y dependencia, y la intervención y manejo integral de los trastornos de conducta en personas mayores.
Adaptación a la época poscovid-19, con modularización o sectorización de las residencias en unidades convivenciales más pequeñas y un mayor número de habitaciones individuales, que dificulten la transmisión de la infección y el riesgo de contagio. A ello se añaden otros elementos como vestuarios adaptados para el personal, con circuitos diferenciados de entrada y salida para reducir el riesgo de contaminación, y terrazas exteriores, que permitan un paseo seguro.
Una de las grandes novedades de este equipamiento será un jardín terapéutico, que facilitará que las personas tengan un lugar de esparcimiento seguro, y mejorar la salud física y mental de las personas, que han sido afectada por la covid-19 y por las medidas de prevención que han debido ser tomadas en los centros.
Hito en la colaboración público-social. Se trata de un modelo de responsabilidad pública y gestionado por una cooperativa de iniciativa social, que la Diputación Foral de Álava tiene “voluntad de seguir desarrollando en el futuro, ya que debemos velar por la sostenibilidad y calidad de nuestros servicios sociales”, ha asegurado el diputado general.